Dia 5: Cultura, cultura.. y fin de Viena.

(Escalera principal del Kunsthistoriches Museum)

Nos despertamos muy tempranito, a las 5 de la mañana, nos bañamos y desayunamos en el hostel. Teniamos desayuno incluido.

Cuando terminamos nos fuimos para la musseumgasse que es la calle de los museos y nos pusimos a ver a cual entrabamos. Nos decidimos por ir primero al Leopold Museum, donde habían exposiciones de cuadros de Florentina Pakosta, Gustav Klimt, Egon Schiele y muchos mas. Realmente hermoso, pero era solo de cuadros y bastante chico el museo…a comparación del que visitamos después sobre todo!

Fuimos a el Museo de Historia del Arte de Viena (Kunsthistorisches Museum) después, que es un edificio ENORME, y que justo en frente tiene otro edificio exactamente igual, que es el de Historia natural (Naturhistorisches Museum).  

Cada uno de los pilares del museo tenia 150 mil detallitos que a medida que los ibas viendo, ibas llevando la mirada al techo que estaba llena de pinturas, estatuas y relieves que te ponían del moño. Eso solamente en la entrada. No habíamos ni pagado la entrada y ya estábamos sacándole fotos a las paredes de lo hermosas que eran.

Ya dentro del museo nos dimos con que tenia 3 pisos, cada piso como 150 metros y habían muchas exposiciones distintas en cada piso y cada sector. El piso de abajo era la sala de colección Egipcio-Oriental y la colección de antiguedades, donde habian estatuas, sarcofagos y reliquias egipcias, seguido de griegas y romanas.

El segundo piso era la pinacoteca. Por un lado estaban las pinturas neerlandesas, flamencas y alemanas, y del otro lado italianas, españolas y francesas. Miles y miles de cuadros. Una sala mas increíble que la otra y entre los miles de autores habían un par de cuadros de Rembrandt y Velazquez.

El tercer piso era El Gabinete Numismático, que es una de las cinco colecciones de monedas mas grandes del mundo. Habian mas de 200.000 monedas y medallas, y podias ver la evolución de todas. Era un monton de cambio pal colectivo.

Salimos de ese museo muertos cerebralmente de tantas cosas que vimos. Habia tanto tanto tanto para ver que nos saturó un poco y nos dejó medio cansaditos, asi que comimos algo asi nomas en la calle, visitamos el parlamento (el de la foto del posteo anterior), y la rathaus que tenia una pista de patinaje sobre hielo enorme adelante, con lo que parecía ser una feria. Lleno de gente.

 Despues de perdernos otra vez siguiendo las indicaciones de Lisandro (coff coff), nos volvimos al hostel  a dormir un ratito. Eran cerca de las 3 de la tarde.

Cuando nos despertamos tipo 5 fuimos a buscar donde era el lugar del concierto, y lo encontramos recién a las 7 y 10 de la tarde. El concierto era a las 8 y 15, asi que comimos algo  a los pedos y entramos a las 8 al salón.

  

El concierto estuvo hermoso y muy completito. Primero un par de sinfonía, una soprano cantó un Aria, después cantó con un tenor, y por supuesto después llegaron los valses, que fueron bailados por una parejita chistosa. La verdad fue hermosísimo y disfrutamos cada segundo. Sobre todo cuando el pianista se descremó tocando en Rondo alla turca.

Ya terminada la cuestión, nos pusimos a caminar para buscar el metro, y antes de las 11 de la noche ya estábamos en el hostel, al otro dia saliamos a Praga antes de las 6 de la mañana asi que nos teniamos que levantar a las 4, y el dia 6 empieza ahí.

           ---------------------------------- Fin de Viena ---------------------------------------------

Viena es una ciudad BELLA. Todos los edificios son enormes y majestuosos… cada una de las edificaciones (hasta un Mac Donalds o una farmacia en una esquina) parece algo importante. Los detalles y la limpieza de todas las construcciones es fascinante.

 Fuera de su belleza, Viena tiene una noche bastante aburrida. No hay mucho para hacer (siendo joven digamos), y el 70% de la población son viejos y muy conservadores. 

Lo que si hay es muchos espectáculos para ver, música por todos lados…pero también es la ciudad donde mas nos perdimos para encontrar lugares porque las calles, o no tenian nombre, o la señalización era medio pobre. Chau Viena!